El arte floral japonés, Ikebana, aúna tradición y creatividad para representar la belleza natural, el paso del tiempo y el lugar del ser humano en el universo. Con más de 500 años de historia, este arte relaciona el ciclo natural de nacer, crecer, morir y renacer.
Ikebana, el sutil arte de lo efímero
La costumbre budista de colocar las flores como ofrenda para los dioses, influenció a Japón para abrir el camino hacia el posterior nacimiento y desarrollo del Ikebana. Una de las artes tradicionales más conocidas de su cultura hoy en día. Busca mostrar la belleza y la estacionalidad de la naturaleza para poder disfrutar de su contemplación. Al mismo tiempo, refleja el interior de la persona que ha creado la obra.
Por ello, en Japón mucha gente practica Ikebana en su vida privada. No solo sirve para decorar, sino que también es meditación, paz, crecimiento interior y tradición. El Ikebana es sin duda, una evocación poética a la sencillez y naturalidad de la belleza.
Nuestras coronas florales en Castellón
El arte floral se utiliza para mostrar alegría, amor, felicidad e incluso empatía en momentos de dolor. La idea no es nueva ya que se han encontrado evidencias de que ya se posaban flores junto a los difuntos hace más de 2.500 años. Y es una tradición que nos sigue acompañando. Sin embargo, ha ido evolucionando hasta convertirse en un arte. Centros de flores, coronas y ramos acompañan a día de hoy a nuestros seres queridos en su marcha. Si quieren ver algunos ejemplo de adornos florales pueden pulsar aquí y ver en nuestra página web algunas propuestas.