Cuando un ser querido fallece es habitual informar a su círculo de conocidos para que acompañen a la familia en los duros momentos de la despedida. Para informar de la muerte de un ser querido, es posible realizarlo a través de una esquela o un obituario. Si bien las primeras son de sobra conocidas por todos, el obituario es un poco más desconocido y suele confundirse con las esquelas puesto que tienen muchas similitudes.

¿Un obituario es lo mismo que una esquela?

Ambos términos tienen varios puntos en común, como que se trata de información relacionada con la muerte de una persona que se publica en medios como periódicos, redes sociales o webs especializadas. Las esquelas son avisos de fallecimiento que incluyen información sobre el funeral y se utilizan principalmente para dar a conocer a familiares, amigos o conocidos del fallecido la pérdida. El objetivo, es que puedan acompañar a la familia si lo desean.

Por su parte, el obituario informa sobre el fallecimiento sin dar necesariamente detalles del funeral, sino que el texto se aprovecha para repasar la trayectoria de la persona. Su objetivo, pasa principalmente por comunicar el fallecimiento y rendir homenaje a esa persona que ya no está.

Cómo escribir un obituairo

El obituario se caracteriza por incluir la siguiente información:

• Detalles de la muerte

Lo obituarios típicos, comienzan por señalar cuándo ha fallecido la persona y algún detalle a destacar sobre el momento en que ocurrió, como que fue el viernes en casa tranquilamente, por ejemplo. Además, también puede incluir pequeñas pinceladas de información sobre la causa de la muerte, como si ha sido tras una dura batalla contra alguna enfermedad o por causas naturales.

• Información biográfica

Para llevar este texto a un terreno más personal, se suelen incluir datos sobre su lugar de nacimiento, lugar en el que creció, sitio donde realizó sus estudios, etc. También es habitual incluir grandes hitos y logros que hayan supuesto un gran impacto en su vida, como haber obtenido algún reconocimiento importante o haber desempeñado un papel relevante en la sociedad.

• Una foto característica para el recuerdo

La foto debe ser un recuerdo agradable de esa persona, transmitir un buen momento donde era feliz. Además, es importante escoger una foto bien iluminada, tomada en los últimos años para asegurar que la gente reconozca a su ser querido. En los periódicos, añadir una foto puede tener un coste extra, pero en internet suele ser gratuito.

• Hacer hincapié en aquello que le hacía especial

Al escribir sobre la vida de una persona, siempre es mucho más emotivo destacar aquello que le hacía única y especial. Imagina que era una persona apasionada de los libros, puede comentar cuántos libros había leído, cuáles eran sus favoritos, cómo era capaz de transmitir a su familia ese amor por la lectura… El objetivo es mostrar aquello que destacaba de tu ser querido y le hacía irremplazable.

Con las nuevas tecnologías, se ha vuelto muy común optar por los obituarios en redes sociales, los cuales se caracterizan por ser más espontáneos.  Alguien de la familia o alguien cercano puede escribir unas palabras de cariño que sirvan para honrar la memoria de esa persona, lo que generará comentarios de pésame y apoyo para sus allegados. Este obituario puede publicarse en los perfiles sociales de algún familiar o amigo, o en el propio muro de la persona fallecida para que su red conozca lo que ha sucedido.

El obituario, es la opción perfecta para plasmar en palabras todo el amor y la felicidad que esa persona ha aportado a tu vida❤️