El bloqueo emocional puede aparecer cuando fallece una persona cercana o un ser querido. Cuando esto ocurre, se manifiesta con señales que hay que reconocer para poder abordar la situación.
Qué es el bloqueo emocional
El bloqueo emocional es la sensación que tiene una persona de sentirse paralizada ante una situación que le supera. Es un mecanismo de defensa que utiliza nuestro cuerpo de manera inconsciente para evitar sentir dolor. En el caso de la pérdida de un ser querido, este bloqueo suele aparecer en la primera fase del duelo, siendo frecuente en las muertes inesperadas. Éstas, son las más difíciles de afrontar porque no hay un aviso previo como, por ejemplo, una enfermedad grave. Por ello, los familiares o amigos cercanos no tienen la oportunidad de prepararse y mentalizarse ante la situación. En ese momento, es cuando ocurre el bloqueo emocional, como si el cerebro no pudiese procesar la información y decidiese posponer el dolor.
Síntomas del bloqueo emocional
Los síntomas se pueden separar en físicos y psicológicos.
Por una parte, en el ámbito psicológico, el bloqueo emocional puede provocar: agotamiento mental, pérdida de energía, nerviosismo continuo, insatisfacción.
En cuanto al ámbito físico, conlleva: dolores de cabeza y musculares, náuseas, defensas bajas, alteración del sueño.
Cómo actuar ante un bloqueo emocional
No hay que ver el bloqueo emocional como algo negativo, también puede convertirse en una oportunidad para superar una situación y mejorar. No se trata de ocultar o ignorar esos sentimientos, sino de enfrentarlos.
A continuación, algunos consejos de cómo actuar si te encuentras en esa situación:
1. Eliminar los pensamientos negativos. Hay que visualizar las situaciones con un punto de vista más optimista ya que cuando las emociones son positivas, la mente se libera poco a poco.
2. No te juzgues. No pienses que eres culpable por sentirte así. Es algo que no se puede controlar y es normal tras el fallecimiento de un ser querido ver la situación como algo irreal, que pensemos “esto no ha pasado”. Ser consciente de la situación ayudará a entender que es una reacción normal.
3. Céntrate en ti mismo. No te autoexijas, es importante que dediques tiempo a tu cuerpo y mente. Haz algo de ejercicio, cuida tu alimentación, descansa bien… son pequeñas cosas que ayudarán a que liberes la mente y las emociones.
4. Rodéate de las personas que te reconfortan. Acércate a tu familia, amigos, pareja… esto ayudará a que te sientas bien y las emociones fluirán más fácilmente.